Espérame en las nubes


 

__Era como si el tiempo no hubiera pasado, ahí estaban ambos de nuevo, en el mismo lugar.

Después de todo un año la emoción de volver a verse es inmensa.

Eran tantas las cosas vividas por ambas partes en ese tiempo...

Apenas podían pronunciar palabra, apretaron fuerte sus manos con una enorme sonrisa.

El quiso saber sobre el pequeño, y ella relataba con orgullo y le contaba las virtudes que se estaban desarrollando en el, algunas de las cuales eran consecuencia de las cosas vividas por el trabajo de su madre, a la cual pensaba que tenía que proteger de los malos. Decía que estaba haciéndose mayor con mucha rapidez, sin apenas disfrutar de su niñez, motivo por el cual ahora habían regresado a su ciudad natal.

Ahora era ella quien preguntaba como era la vida de ese hombre que le había salvado la suya con anterioridad.

__ Mi vida no ha tenido cambios notables, solo he intentado que sea algo más tranquila, he comprado una pequeña casa en el lago, junto a la de mi padre. Y he cambiado de trabajo, ya me siento demasiado mayor para seguir corriendo detrás de delincuentes. He vuelto a trabajar para el gobierno, pero solo como asesor, con mi propia oficina.

__Hablaron ahora sobre ella, sus andanzas, sus logros y su soledad, eso decía ella: cuando entro en casa la siento tan vacía, tan carente de muchas cosas, y sobre todo falta de calor humano. 

Aquella noche, después de mucho diálogo y un buen vino, fueron a la casa del lago, donde entre apasionados besos y abrazos, rodeados de la magia que solo aquel lugar era capaz de desprender, dejaron que sus cuerpos se entregaran al placer.

A la mañana siguiente regresaron a la ciudad a buscar a Samuel, que estaba al cuidado de su madrina.

__ Oh Sammy ¡qué grande estás! Dame un abrazo campeón ¿has cuidado de tu madre como me prometiste?

__ ¡Claro!¿No has visto que está más guapa? Y no he dejado que tenga novio, pero ssssssssshhhhhhh, que ella no se entere. Todos rieron a carcajadas por la respuesta del niño.

Pasaron horas juntos. Fueron de compras, a visitar a viejos amigos y la tumba de su difunta hermana, en la cual no habían faltado flores desde aquel fatídico día.

__Hermana, te extraño, dijo en voz baja. No imaginas lo dura que ha sido mi vida sin ti este tiempo. 

 

__Ya por la noche salieron a cenar. una noche en calma, rodeados de buena música, la cual les llenaba de nostalgia. 

__¿Por qué me miras de esa forma?

__Te he recordado cada día desde que me marché, no ha pasado un segundo sin...

Anoche al sentirte de nuevo, tus manos, la calidez de tu voz, tus caricias...me di cuenta que quiero...

__Justo en ese momento suena el teléfono interrumpiendo la conversación:

__ ¿Dígame? Si, soy yo

__Durante un tiempo solo hubo silencio

__Si, voy enseguida. 

__Susan, debo irme, tengo que ir a la oficina. 

__¿A estas horas?

__Si, ha pasado algo.

__Pediré a Jorge que te lleve a casa.

__Pasaron tres días sin que ella tuviera noticias de Michel.

Cuando por fin fue a visitarla ella no estaba, tenía un compromiso.

El le dejó una nota pidiéndole que lo buscara cuando pudiera.

__Lo siento mucho, de veras...

__Gracias.

__Eran casi las 11 de la noche cuando por fin retomaron la conversación pendiente

__Michel, tengo que regresar, tengo compromisos con los que cumplir, y no quiero

hacerlo sin decirte que...

__No se si estoy preparado para dejarlo todo, no se si quiero renunciar a mi vida ahora

que he recuperado la estabilidad, y tampoco voy a pedirte que renuncies a la tuya, no sería justo.

__Susan y Samuel de nuevo están en el aeropuerto, mientras Michel les observa marcharse.

__Han pasado ya seis meses. 

__Un taxi se detiene ante la puerta de la casa, donde Michel es recibido solo por Samuel que acaba de llegar del colegio.

Una señora de pelo cano les sirve limonada mientras esperan.

Al sentir las llaves el pequeño sale corriendo a su encuentro ¡mamá, mamá mira quien ha venido!

Ella tiene en su cara la huella de un día de mucho trabajo, pero no duda en correr a sus brazos




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